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Vacas lecheras en pastoreo, un modelo de agricultura sostenible
Presentación

El historiador Gaspar Fructuoso, en sus escritos “Añoranzas de la Tierra”, redactados entre 1586 y 1590, describía de esta forma la Isla Terceira en el archipiélago de las Azores: “Tiene esta isla infinidad de ganado vacuno y ovejas. Y muchos puercos mansos y de monte, y algunas cabras, como es muy abundante de leche, manteca, nata, quesos y requesones y preciosas cuajadas.”

Cuatrocientos años después de haber sido escritos estos textos, un visitante puede fácilmente repetir las mismas palabras. Es el reflejo de que la agricultura practicada en las Azores, región donde el equilibrio ecológico es particularmente frágil, posee un manejo adecuado del medio ambiente y se preocupa por el bienestar animal. Este tipo de agricultura es capaz de asegurar, por sí sola, la producción de productos agrícolas a precios competitivos, lo que trae ventajas económicas para los productores agrícolas y para las poblaciones locales, crea perspectivas para las familias rurales y permite, igualmente, el desarrollo de otros sectores con un elevado peso económico, como el turismo y los servicios.

Este modelo de manejo de ganado productor de leche que en los países industrializados está confinado a las zonas marginales, pero que en los últimos años ha llegado a suscitar un crecimiento exponencial de interés por su singularidad, es un modelo característico de las Azores, la parte más occidental de Europa.




Las Azores se caracterizan por la aplicación de un modelo con características específicas: las vacas lecheras pastorean todo el año, son pocas las estructuras para establos o almacenamiento de alimentos, una vez que la base de la alimentación es el pasto natural, complementada por forrajes conservados y por concentrado, siendo éstos utilizados por necesidades energéticas debidas a las oscilaciones climáticas, ó simplemente por los deseos del productor. El pastoreo es rotativo y asegura una correcta gestación del pasto natural, previniendo también un pisoteo excesivo que impide la destrucción de la camada vegetal. Las parcelas están delimitadas tradicionalmente por muros de piedra que funcionan como protección contra los vientos e impiden el escurrimiento del agua. La delimitación con cercas eléctricas es aquella que, sin embargo, permite una conducción más funcional de los animales a pastar. Este sistema de explotación semi-intensivo se ha revelado como importante para la salud animal.

El ordeño es efectuado directamente en los pastos gracias a la utilización de máquinas de ordeño móviles, que representan una innovación azoriana. Aunque es posible apacentar 2-2.5 vacas/he, un buen pasto permite alimentar tres vacas por hectárea y la producción media oscila entre 15 y 25 litros de leche por día, con un costo más bajo que en el resto de la Europa Comunitaria.

Las Azores representan 2,5% del territorio portugués, pero en términos productivos contribuyen con cerca del 30% de la producción total de leche en Portugal.

El sistema de gestación de la vaca en pastoreo es, para todos los efectos, un modelo productivo muy avanzado capaz de ofrecer a precios muy competitivos, un producto excelente. Por sus características de facilidad de implantación y reproducción, unidas a una pequeña inversión económica, este modelo de manejo en pastoreo es fácilmente aplicable – en su totalidad o en parte – en los países en los que existan vacas lecheras.